El film narra la historia real de un niño que fue abandonado por sus padres al nacer y que se crio en el bosque profundo francés. Víctor, éste fue el nombre que se le puso cuando fue encontrado, no conocía norma social alguna y sus preocupaciones se basaban solamente en satisfacer sus necesidades más básicas. Durante el invierno de 1798, ante la falta de alimento, el niño salvaje se acercó a una granja en busca de provisiones y allí fue donde lo recogieron. Científicos y estudiosos se interesaron mucho por el caso, puesto que ofrecía múltiples posibilidades investigadores y al final, fue el médico Jean-Marc-Gaspard Itard quien se hizo cargo de su educación.