En los 80, durante la dictadura militar en Chile, mi tío Jarda vino de Europa, con su cámara VHS. Traía las cenizas de su madre, mi tía abuela EDITA, decían que ella había perdido la razón, fue trotskista y estudiante de la Bauhaus. No querían hablar de política, ni de religión. ¿Estaba EDITA loca?