En plena dictadura, un hombre de 52 años, cansado de buscar a sus dos hijos detenidos por la CNI, rocía de bencina su cuerpo y se prende fuego a lo bonzo frente a la Catedral en Concepción. En respuesta a este macabro hecho nace en Santiago de Chile el “Movimiento Contra la Tortura Sebastián Acevedo».